Tri-City Dust Devils Guía para el partido

Antiguos Portland Rockies, el equipo pasó a llamarse Tri-City Dust Devils al trasladarse a Pasco (Washington) en 2001. El nombre es un guiño a los inofensivos torbellinos que pueden producirse en las tierras de cultivo de la región, y los colores caqui y azul del logotipo y la mascota del equipo, "Dusty" -una caricatura de ese fenómeno meteorológico-, evocan los cielos azules de la región, el azul marino oscuro del río Columbia y el marrón suave de las onduladas colinas de la zona.

Con capacidad para casi 3.700 aficionados, el estadio Gesa -antes conocido como Tri-City Stadium y Dust Devils Stadium- forma parte del Pasco Sporting Complex en el noroeste de Pasco, justo al lado de la interestatal 182 y no muy lejos del polivalente HAPO Center, de varios hoteles de la zona y de la variada oferta de restaurantes y bares que se alinean en Burden Road y North Road 68. El estadio acoge a más de 80.000 aficionados al año para los partidos de los Dust Devils y es sede de otros eventos comunitarios a lo largo del año.

Ubicación

6200 Burden Boulevard, Pasco, WA 99301

Aparcamiento

Hay aparcamiento y una parada de autobús de Ben Franklin Transit a menos de 800 metros de la entrada del estadio. El estadio Gesa se distingue fácilmente gracias a su alta sombrilla, que ayuda a proteger a los aficionados de los brillantes rayos del sol poniente a la vez que mantiene frescas las temperaturas del estadio. Cuando no estén viendo la acción en el campo, los aficionados podrán disfrutar de una impresionante puesta de sol con las colinas de Horse Heaven a lo lejos. Explora el vestíbulo del estadio y descubre los muñecos a tamaño real del ex Dust Devil y actual quarterback de la NFL, Russell Wilson, así como de Erik Mertens, también conocido como "Erik, el chico de los cacahuetes".

Entradas

Los precios de las entradas varían en función del tipo de entrada, incluidas las ofertas de temporada y las excursiones para un solo partido. Para más información sobre entradas, visite la página web oficial de los Tri-City Dust Devils aquí.

Asistir a un partido de los Dust Devils es una delicia para toda la familia, desde los aficionados más jóvenes hasta los más versados en béisbol. La temporada comienza tradicionalmente a principios de primavera, hacia abril o mayo, y se prolonga hasta septiembre. Los aficionados que asisten a los partidos en casa pueden disfrutar de noches temáticas, regalos y eventos y promociones especiales, como fuegos artificiales después de los partidos y descuentos en las concesiones.

En la temporada 2024, los aficionados podrán celebrar en el estadio algunos días festivos, como el Día de la Madre, el Día del Padre y el Día de la Independencia. A lo largo de la temporada, los Dust Devils jugarán como su identidad de Copa, los Viñeros de Tri-City, para celebrar las comunidades hispana y latina de la región. Los Viñeros, o Vintagers, representan a los trabajadores agrícolas emigrantes que son cruciales para la industria vinícola de Washington y la producción de uvas de la región.Los Dust Devils también jugarán como los Columbia River Rooster Tails para celebrar las carreras locales de hidroaviones.

Los aficionados pueden darse un festín con la comida tradicional de los estadios de béisbol, disponible en un puesto de comida junto a la línea de primera base, que incluye perritos calientes, cacahuetes y nachos. En The Fry Shack, situado en el lado opuesto del estadio, hay más platos del menú, como sándwiches de pollo crujiente, patatas fritas cargadas y patatas fritas con ajo. ¿Buscas algo más ligero? Dirígete a 1st Base Concessions, donde te esperan deliciosos bocados y refrescantes bebidas. Mejore su experiencia con pretzels, palomitas y mucho más. No se pierda recibir cacahuetes o Crackerjack de Erik The Peanut Guy a lo largo de las gradas.

Múltiples puestos de cerveza ofrecen a los visitantes mayores de 21 años una impresionante selección de cervezas artesanales regionales entre las que elegir.

Cuando los Dust Devils salen al campo, la energía que se respira en el estadio es palpable, ya que los apasionados aficionados locales pisan fuerte las gradas metálicas, animan y aplauden al equipo local. Cuando no está haciendo payasadas en el campo, la mascota del equipo, Dusty, patrulla regularmente el estadio, parándose a posar para las fotos y a saludar a los aficionados durante el partido.